¿Sabías que el 35% de los recuerdos de nuestro inconsciente son asociaciones olfativas y tan sólo un 5% son visuales?.
Los aromas, aceites, esencias se utilizan desde siempre para curar, el poder de las plantas es insospechable, los aromas son la esencia de la naturaleza que penetra en tu cuerpo a través de tus sentidos, actuando sobre todas las dimensiones de tu ser, tanto físicas como espirituales. Aunque tu mente racional no lo entienda, un aroma te puede transportar en un instante a un estado de relajación absoluta.

Sus beneficios son múltiples, pero quizás el más relevante es la restauración del equilibrio, es sumergirse en una experiencia y re-descubrimiento de los sentidos del tacto y el olfato, sus efectos son tan potentes que las mejorías pueden apreciarse hasta en animales, que sin poder comunicarse verbalmente manifiestan claras mejorías.

Los aceites esenciales con sus aromas pueden ser el toque mágico que necesitas para conectar con tu divinidad espiritual, es el complemento perfecto para las terapias cuánticas, un extra que ayuda a sintonizar mejor las correcciones que aplicamos.

Existen múltiples métodos de aplicación y podemos encontrar el que mejor se adapte para tí, como la esencia o combinación adecuada en función de tus necesidades, eres un ser único con tus propias vivencias y emociones y forma de experimentarlo.

Los aromas ayudan a elevar tu vibración y conectar con tu divinidad y con tu parte más esencial, es volver a lo simple y en esa comunión lograr la alquimia transformadora.

Experimenta esta nutrición espiritual, libera viejos patrones y ábrete a una nueva dimensión, de compasión, serenidad y plenitud.